Tren del Sur de Tenerife es “un disparate”, según Ben Magec
El coletivo, miembro de Ecologistas en Acción, denuncia el impacto sobre el territorio de un proyecto que costará 1.600 millones de euros a través de 80 kilómetros de vía ferroviario
El tren del Sur de Tenerife, impulsado por el Cabildo, es “un disparate“, en opinión del grupo ecologista Ben Magec, vinculado a Ecologistas en Acción.
El colectivo ecologista y defensor en litigios climáticos recuerda, en un comunicado público, que el tren recorrerá 80 kilómetros, dispondrá de 7 paradas y costará 1.600 millones de euros, con el fin de resolver el colapso de vehículos en las carreteras de la isla de Tenerife, pero, según Ben Magec, “es un disparate económico y un destrozo medioambiental“.
Con estos datos y dada la orografía de la isla, el proyecto tren del Sur de Tenerife no solo ocupará espacio con la vía ferroviaria de 80 kilómetros proyectada. “Devorará territorio para construir todo el entramado de infraestructuras necesarias para conectar las siete paradas con los núcleos poblacionales de su recorrido“.
La construcción de este megaproyecto de 1.600 millones de euros que se obtendrían de la administración insular, el gobierno central y fondos europeos, junto a su mantenimiento anual, “mermarán las arcas públicas en un momento histórico de necesidades acuciantes como son la sanidad, la dependencia o la educación. Además no ha habido participación social ni estudios de movilidad insular que sepamos desde la sociedad civil que justifiquen tal disparate”.
En Gran Canaria el Equipo de Investigación en Economía de las Infraestructuras, el Transporte y el Turismo (EITT) de la Ulpgc publicó, en septiembre de 2021, el estudio “Evaluación Socioeconómica del Tren de Gran Canaria”, en el que concluyó que el tren al Sur de Gran Canaria no es rentable ni social ni financieramente.
En 1998, el estudio Sener, encargado por el Cabildo de Tenerife, afirmó que de seguir incrementándose el número de vehículos en el sur de Tenerife, en el año 2018 “alcanzaríamos el colapso de sus carreteras“. “Durante estos 24 años, desde la publicación del estudio, se han construido un gran número de vías que no han resuelto el problema y de hecho lo han incrementado. Tanto en Tenerife como en Gran Canaria rondamos los ochocientos vehículos por cada mil habitantes llevándonos a la sexta posición mundial de lugares con más coches por residentes“.
El principal problema de movilidad en Tenerife y Gran Canaria, “es el enorme volumen de coches presentes especialmente en las horas punta de entrada y salida del trabajo y de los centros educativos“.
Desde Ben Magec–Ecologistas en Acción, “mantenemos que no hace falta ampliar más autopistas ni construir megaproyectos que consumirían territorio y acapararían presupuestos públicos si todas las administraciones se volcaran en resolver este colapso a través de una decidida inversión en el transporte público, guaguas lanzaderas con participación público-privada destinadas a mover a las trabajadoras y trabajadores a bajo coste, guaguas a demanda para resolver la movilidad de los municipios alejados de las capitales y la denominación de tramos exclusivos para dar prioridad a la guagua con el carril bus y carril bus/vao“.
“A esto hay que añadir la obligatoriedad de más sendas ciclistas, sendas peatonales y ayudas a la compra de bicicletas para el fomento de la movilidad saludable. Canarias debe hacer políticas de vida en cercanía en contraposición con la hipermovilidad en la que vivimos“.
Be Magec acredita su defensa del sitema pública. “La guagua ha demostrado ser el medio de transporte público más eficiente ya que es discrecional, puedes adaptarlo a la demanda social, crea empleo de larga duración, necesita diferentes grados de cualificación profesional, no requiere de más infraestructuras y es asequible. Si además, las administraciones se decidieran a reservar tramos de autopista para el carril bus y darles preferencia en los cruces, semáforos, incorporaciones… las guaguas no se quedarían atrapadas en los atascos lo que estimularía que los conductores y conductoras dejen el coche en casa y se desplacen en transporte público“.
Con el recientemente aprobado “Anteproyecto de Ley Canaria de Cambio Climático y Transición Energética” ha llegado la hora “de transformar nuestra cultura de la movilidad sin invadir más espacio, sin añadir un nuevo medio de movilidad rígido, segregador del espacio y que requiere de una ingente e insostenible demanda energética“.