Tele Canaria camina a modelo público
Tele Canaria camina a modelo público.
La suspensión, este lunes, del concurso de informativos sobre la Tele Canaria, cifrado en 144 millones de euros que paga el presupuesto de los contribuyentes, devuelve al Parlamento regional la iniciativa planteada por Podemos.
El Ejecutivo autonómico sujeta su estrategia al apretado calendario que va hasta junio, que no es otro sino crear un espacio de legitimidad institucional para que los noticieros de la Tele Canaria no vayan a negro, que es como denomina el argot audiovisual la secuencia de vacío que genera, a partir de ahora, la cautelar aplicada por un juzgado de lo contencioso de Santa Cruz de Tenerife.
El auto de suspensión temporal del concurso constituye uno de los supuestos manejados por el Ejecutivo y el Parlamento regional, a tenor de las controversias generadas en los últimos meses.
La propuesta de Podemos para reconfigurar la adjudicación de los informativos a un ente público, abre nuevos escenarios sobre contenidos, control y calidad de una Tele que persigue cohesionar al Archipiélago.
El auto del juzgado, lejos de enconar, se presenta como un bálsamo para sentar las bases de una nueva programación que devuelva la cadena a la defensa del interés general que justificó su constitución hace 20 años y que, desde entonces, ha supuesto 1.100 millones de euros de gasto para un índice de audiencia por debajo del 2%.