Nicaragua libera al cura Cipriano Meneses y lo envía al Vaticano
El sacerdote de Estelí ofició misa durante 4 años en Las Palmas. El régimen de Ortega mantenía en prisión 12 sacerdotes, algunos en el centro de torturas de Chipote
Nicaragua libera al cura Cipriano Meneses y lo envía al Vaticano. El sacerdote de Estelí ofició misa durante 4 años en Las Palmas, en la antigua iglesia de los Franciscanos en Padre Cueto. El régimen de Ortega mantenía en prisión 12 sacerdotes, algunos en el centro de torturas de Chicote.
Nicaragua saca del país centroamericano a 12 sacerdotes que había encarcelado por razones ideológicas y políticas, y los envió al Vaticano tras un acuerdo con las autoridades de la Iglesia Católica, informa Aci Prensa.
Entre los liberados no está Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa y Administrador Apostólico de Estelí, condenado el 10 de febrero a 26 años y 4 meses de cárcel. Un día antes de la sentencia, el prelado rechazó ser parte del grupo de 222 deportados que fueron enviados a Estados Unidos, a quienes luego la dictadura de Daniel Ortega los despojó de la nacionalidad y de sus bienes en Nicaragua.
El régimen de Ortega informa que la excarcelación de los 12 sacerdotes se dio “después de sostener fructíferas conversaciones con la Santa Sede”. Este grupo, añade el texto, se dirige al Vaticano y ha “viajado hacia Roma, Italia, en la tarde del miércoles”.

Cipriano Pineda Meneses, sacerdote en Padre Cueto de Las Palmas durante cuatro años, está detenido en Nicaragua.
En el texto, el Gobierno asegura que el acuerdo se logró “con la intercesión de altas autoridades de la Iglesia Católica en Nicaragua y en el Vaticano”.
El grupo fue “según coordinaciones, por personal de la Secretaría de Estado de la Santa Sede”, añade.
Los sacerdotes liberados son Manuel Salvador y José Urbina, de la Diócesis de Granada; Jaime Montesinos, de Matapagalpa; y Fernando Zamora, de Siuna.
También están los presbíteros Osman Amador, Julio Norori Jiménez, José Iván Centeno Tercero, Yessner Cipriano Pineda Meneses, Álvaro José Toledo Amador y Pastor Eugenio Rodríguez Benavidez, todos de la Diócesis de Estelí.
Completan el grupo de sacerdotes liberados Cristóbal Reynaldo Gadea Velásquez, de la Diócesis de Jinotega; y Ramón Angulo, de Bluefields.
Ocho de estos sacerdotes fueron enviados el 15 de octubre a la cárcel de torturas El Chipote.
La Diócesis de Canarias quiere manifestar su alegría por la liberación y, a la vez espera que se logren unas relaciones Iglesia-Estado en Nicaragua que sean garantía de justicia, libertad y paz.