Mínimo vital del Gobierno para acabar con la pobreza extrema
La cantidad que se baraja son 500 euros al mes, más 200 euros por persona mayor a cargo y otros 150 euros por hijo. Podría ser compatible con la Prestación de Inserción de Canarias
Mínimo vital del Gobierno para acabar con la pobreza extrema de España, una de las más altas de Europa.
La cantidad que se baraja son 500 euros al mes, más 200 euros por persona mayor a cargo y otros 150 euros por hijo.
El objetivo de la medida es actuar de forma urgente para casos en los que no hay ya ningún ingresocomo consecuencia de la crisis.
Canarias deberá abordar si el Ingreso Mínimo Vital es compatible con la Prestación de Inserción (PCI), a la que se acogen unas 10.000 personas y que cuenta con un presupuesto de 80 millones de euros en 2020. El 35% de la población canaria vive bajo el umbral de la pobreza.
Aunque la PCI está condicionada a no percibir ni paro, subsidio ni pensión, el Ejecutivo tendrá que delimitar el perímetro de los beneficiarios. el importe de la cuantía básica mensual ronda los 500 euros y los complementos variables rotan en función de los miembros que formen la unidad de convivencia y acepten participar en los programas específicos de actividades de inserción: 64 euros (2 miembros), 115 euros (3), 147 euros (4); 173 euros (5) y 192 euros (6).
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el vicepresidente segundo de Derechos Sociales, Pablo Iglesias, han pactado poner en marcha ya en el mes de mayo de 2020, el Ingreso Mínimo Vital en el que está trabajando el Ministerio de Inclusión y Seguridad Social de José Luis Escrivá, con la colaboración del departamento del líder de Unidas Podemos.
PSOE y Podemos tenían una propuesta en su programa electoral de renta mínima universal, que incluyeron en su pacto de Gobierno.
Unidas Podemos lleva semanas presionando para que se apruebe cuanto antes esta prestación, al menos una modalidad “puente“, hasta que estuviera listo el ingreso mínimo vital definitivo.
La medida valorará la situación de los hogares, no la del individuo, y que un 10% de los beneficiarios serían familias monoparentales, es decir, entre 90.000 y 100.000.
La renta mínima tendrá un “itinerario de inclusión” que pondrá especial atención en la situación de las familias y no del individuo, porque su objetivo es “llegar a los umbrales de protección” según la estructura de cada hogar, incluidos los monoparentales.
Escrivá ha explicado, además, que será “complementaria” a las ayudas similares que ya existen en las comunidades autónomas y ayudarán a acabar con la “pobreza extrema” que viven muchas familias del país, uno de los más altos en Europa.