Los presupuestos de 2024 y la Ley de Estabilidad
Pedro Sánchez no lo tendrá fácil para aprobar nuevos presupuestos en 2024 aunque logre formar Gobierno.
Las leyes de reajuste que ultima Bruselas (deuda y déficit) para cumplir con las reglas de contención del gasto, son ya una realidad.
Los presupuestos tendrían que pasar el visto bueno del Congreso, donde podría reforzarse con los grupos de izquierdas, pero en el Senado se encontrarán con la mayoría del PP.
La única salida que le quedaría al Gobierno de Sánchez pasa por cambiar la Ley de Estabilidad Presupuestaria de 2012 que encabezó el ex ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, para regresarla a su estado anterior. Esta norma, en la época de Rodríguez Zapatero, permitía aprobar los presupuestos tan solo con el apoyo del Congreso, pero la modificación de Montoro incluyó en el punto 6 del artículo 15 que también se necesitara el aval del Senado. Ahí es nada.
Con el calendario de la investidura, las cuentas no estarán a 31 de diciembre para que entren en vigor el 1 de enero, por lo que, tanto por el artículo 38 de la Ley General Presupuestaria como por el 134 de la Constitución Española “si la Ley de Presupuestos no se aprobara antes del primer día del ejercicio económico correspondiente, se considerarán automáticamente prorrogados los presupuestos del ejercicio anterior hasta la aprobación de los nuevos”.