José Rivero: “Es una operación de altos vuelos que utiliza la epidemia”
El abogado y analista político José Manuel Rivero analiza en Radio San Borondón la situación de la actual crisis sanitaria
Afirma que el Estado de Alarma decretado por el Gobierno español bajo la presidencia de Pedro Sánchez supone “una operación política de altos vuelos, aprovechando la lucha contra la epidemia del coronavirus, utilizándola como pretexto e intentando lograr, fundamentalmente, objetivos políticos“.
Según Rivero, que es letrado penalista, el Decreto que declara el Estado de Alarma en todo el Estado establece medidas con una “carga política enorme al anunciar diferir las medidas sociales, económicas y financieras contra la pandemia del Covid-19 a próximos Consejos de Ministros“.
Asegura el analista que el Decreto gubernamental “deroga de hecho el estado de las autonomías, expropiando a las autonomías lo que son competencias exclusivas de las mismas (sanidad, transporte y policías autonómicas), sin concertación previa con los gobiernos autonómos , como si fuera un estado unitario“.
Asimismo, afirma José Rivero que con la designación de las autoridades gubernamentales (mando único), que concentran todo el poder de estado (ministros de Defensa, Interior, Sanidad y Transporte), bajo la dirección del presidente del Gobierno, “propinan un golpe al socio gubernamental, Unidas Podemos, excluyéndolo de la autoridad gubernamental“.
Y añade que trata de configurar, con las medidas de este Decreto de alarma, “una mayoría parlamentaria distinta que sustente el gobierno del PSOE, con o sin Pedro Sánchez: los apoyos a dichas medidas por el Partido Popular, Ciudadanos (Inés Arrimadas avanzó que apoyaría unos presupuestos generales de urgencia, distintos a los pactados con Unidas Podemos) e, incluso, el partido fascista Vox, no son casuales“.
“Una nueva mayoría que blindaría a la monarquía española ante las escandalosas informaciones que, a nivel internacional y nacional, se están difundiendo sobre el cobro de comisiones por parte del Rey emérito Juan Carlos I, entregadas por la satrapía saudita, a través de fundaciones radicadas en zonas off-shore y donde uno de los beneficiarios de esas fundaciones es el actual Rey, Felipe VI“.