Europa incluye al turismo como política clave para la recuperación
Canarias accedería a un paquete de medidas por encima de lo 8.000 millones de euros, según estimaciones oficiales en base a los 750.000 millones. Cuenta atrás para la celebración en Bruselas de la cumbre RUP los días 12 y 13 de octubre
Europa incluye el turismo como política estratégica ante la crisis sistémica provocada por el parón económico que desató la pandemia del virus de Wuhan o Covid-19.
Es la primera vez que la Comisión Europea acepta que el sector turístico se convierta en eje transversal de las grandes políticas comunitarias.
En la práctica, la aceptación del turismo como prioridad se traduce en la transferencia de partidas específicas que ayude a mejorar la supervivencia de la actividad alojativa, comercial y de restauración.
A priori, Canarias accedería a un paquete de medidas por encima de lo 8.000 millones de euros, según estimaciones oficiales en base a los 750.000 millones.
El turismo ha sido, hasta ahora, el hermano olvidado de la economía frente a otros sectores (pesca, energía, mercado interior, etcétera) que no generan ni por asomo ni la misma riqueza ni tanto volumen de empleo.
El dinero final está pendiente de dilucidarse por los 27 Estados miembros (ya no opera Reino Unido) porque el documento hecho público este miércoles, 27 de mayo de 2020, debe pasar el filtro de los países y del Parlamento.
El plan, liderado por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, proporcionaría una inyección fiscal masiva para los países más afectados del bloque, sin que signifique aumentar los altos niveles de deuda de los países del sur, incluidos Italia, España y Grecia, que están por encima de su PIB anual.
La nueva deuda que asumirá la Comisión como propia, se pagaría durante varias décadas, comenzando a partir de 2028. Podría materializarse algún dinero extraordinario, que comenzaría a fluir este año 2020 para detener el colapso de las empresas y mantener fluida la inversión pública.
Todos los países de la UE deben aprobar el plan, que incluye 500.000 millones de euros en subvenciones (sin que sea un cheque en blanco) y otros 250.000 millones de euros en préstamos a los miembros más afectados.
"Hoy nos enfrentamos a nuestro momento decisivo particular."
"Y en nuestra Unión, sabemos que las medidas más audaces son, en verdad, las más seguras para nuestro futuro."
Discurso completo @vonderleyen hoy en #EPlenary presentando #NextGenerationEU:https://t.co/BJDDiU6GIf pic.twitter.com/o9JrhYzCe7
— Comisión Europea (@ComisionEuropea) May 27, 2020
Es probable que las divergencias sean más acentuadas entre partidarios y detractores de subvenciones y préstamos, qué condiciones están vinculadas en las operaciones de concesión de fondos y cómo ganarse a los nuevos miembros más pobres de la Europa del Este (el antiguo Telón de Acero).
Los gobiernos más ricos del Norte, incluidos los Países Bajos, Dinamarca, Austria y Suecia, ya cuestionaron el plan. Apodados los “cuatro frugales“, quieren evitar el riesgo político de poner a sus contribuyentes en el apuro para pagar la deuda de la UE emitida para financiar grandes gastos en el sur del bloque.
El respaldo de la canciller alemana, Angela Merkel, y del presidente francés, Emmanuel Macron, a un plan de recuperación masiva (medio billón ahora ampliado) estuvo precedido de una reciente decisión de la Justicia alemana que dudaba sobre la legalidad de los programas de compra de bonos del BCE, que se han convertido en los vehículos de la recuperación de la UE de la crisis financiera hace casi una década, con casi 2,2 billones de euros en deuda pública y corporativa privada.
Bruselas respaldará con sus garantías los 750.000 millones de euros, lo que equivale a evaluar un nuevo diseño sobre bonos soberanos europeos que tantas espinas levanta al Norte comunitario.
Los líderes nacionales podrían reunirse en junio, después del día 15 que es cuando se pone fin al cierre de fronteras por el Covid-19. La intención pasa por encontrar un compromiso, aunque podría ser necesario un periodo más amplio más allá del verano, según fuentes del Gobierno canario, que confían en que se mantenga el reconocimiento a las regiones utraperiféricas en la conferencia de los días 12 y 13 de octubre en Bruselas.
Si se implementa, el plan representaría un paso histórico para unir las finanzas nacionales de los 27 países de la UE.
En paralelo, Bruselas intensifica el borrador del marco financiero para los años 2021 hasta 2027, dotado con 1,1 billones de euros.
La clave de bóveda de toda la financiación obliga a los gobiernos a presentar planes de recuperación que demuestren en qué gastarán los fondos siguiendo las recomendaciones económicas y las prioridades europeas, en particular la transición ecológica y digital, además de la estrechez en el control de la deuda.
El Parlamento de Canarias valoró en positivo el plan anunciado por la Comisión.
🏛🇪🇺 La propuesta presentada hoy por la Comisión Europea en el Parlamento va en la dirección correcta para que las regiones de la UE puedan afrontar las consecuencias de la crisis. #NextGenerationEU pic.twitter.com/Gr6JXX3cxt
— Parlamento Canarias (@parcan) May 27, 2020