Casado aguanta hasta el congreso que elegirá a Feijóo
El líder gallego concita el apoyo de los territorios mientras que el presidente saliente se autodescarta después de despedirse tras su derrota frente a Díaz Ayuso en la lucha por el poder
Casado aguanta hasta el congreso extraordinario del 2 y 3 de abril de 2022 que elegirá a Feijóo, según el acuerdo adoptado por los presidentes regionales, que acabó pasadas las 12 de la noche (hora de Canarias). A priori, Casado renuncia a seguir como mandatario tras debatir con los dirigentes territoriales durante cinco horas.
El presidente de la Junta andaluza, Juan Manuel Moreno, ejerció como portavoz para recordar que Alberto Núñez Feijóo “cuenta con el respaldo masivo” del PP para presentarse a presidente, un cargo al que puede aspirar “cualquier militante“.
Según un comunicado emitido por el PP, la portavoz Cuca Gamarra ejercerá, de forma transitoria, como coordinadora general mientras que la presidencia del comité organizador del congreso corresponderá al eurodiputado Esteban González Pons.
Según declararon los barones a la salida de la sede de Génova, en Madrid, existen motivos “para agradecer la labor de Casado“, quien asume el compromiso personal de “no presentarse“, afirmó Carlos Iturgaiz, del País Vasco.
En declaraciones a los periodistas, Feijóo admitió “la desafección social” tras varios días de crisis y apeló a la “grandeza” del Partido Popular, con las “propuestas elevadas a la junta nacional“. “Hemos salido con un partido normalizado hasta el congreso de abril, y lo hemos hecho con una propuesta formalizada para el congreso extraordinario y urgente. No voy a hacer ninguna valoración sobre una vacante, ni tampoco de la presentación a un congreso que no está convocado, que será entonces cuando cualquier candidato decida presentarse. Soy una persona previsible, seria y respetuosa y las formas son imprescindibles. El que tiene que decir si me presento soy yo. Y eso no quita que le agradezca a mis compañeros que digan que soy una persona adecuada“.
“El presidente Casado decidió convocar el congreso y seguirá como presidente hasta ese congreso. Casado es un señor de la política y así lo reflejarán las próximas crónicas“, subrayó Feijóo.
Jornada maratoniana
Tras una jornada maratoniana, la caída oficial de Casado comenzó a primera hora, cuando se despidió en el Congreso de los Diputados tras fracasar su lucha por el poder en la pugna con Isabel Díaz Ayuso y trascender una trama de espionaje para despojarla de la carrera política.
El hasta ahora líder del PP abadonó el Hemiciclo al escuchar que Pedro Sánchez no adelantará las elecciones. Sánchez incluso le deseó “lo mejor en lo personal“, antes de que abandonara su escaño como diputado popular.
La bancada del PP le tributó una salva de aplausos y tan pronto acabó Sánchez su respuesta, Casado salió raudo del pleno, y solo dos diputados (como Pablo Montesinos) se apresuraron a ir tras él.
El final de Casado en el Congreso (el mismo día del 41 aniversario del 23F), se produce 24 horas después de que el PP echara a Teodoro García Egea ante el colapso de la formación conservadora por el intento frustrado de apear a Díaz Ayuso de la carrera política.
El nivel de deserciones fue tan intenso en 72 horas que Casado no tuvo otro remedio que preparar su salida con un congreso extraordinario en abril.
En Canarias, Manuel Domínguez, presidente del PP regional, cambió en 24 horas su sentido del voto y se alejó del ya diezmado líder de los conservadores.
Domínguez, que suplió en enero de 2022 a Australia Navarro, se unió al grupo de los barones autonómicos contrario a la continuidad del secretario general, García Egea.
Los presidentes regionales reclamaban a Casado la convocatoria de un congreso nacional que pusiera fin a su mandato.
En las filas canarias llamó la atención la espantada del diputado por Las Palmas Guillermo Mariscal, defensor de la candidatura de Casado durante el proceso de primarias y actual viceportavoz. Mariscal fue uno de los se puso en pie en el aplauso a Casado.
La decisión de Mariscal se produjo después de que la portavoz, Cuca Gamarra, o la ex presidenta del Congreso, Ana Pastor, dieran la espalda a Pablo Casado y García Egea.
A la dimisión de García Egea se sumó a la de Andrea Levy como presidenta del Comité de Garantías del PP, el área encargada de expidentar a Isabel Díaz Ayuso por presunta corrupción en la Comunidad madrileña.
Estas dimisiones debilitaron más Casado. Su marcha se presentó como inevitable después de que la mayoría de su cúpula y los pesos pesados de la dirección del grupo parlamentario antes afines exigieran un congreso extraordinario.