Canarias acoge a más de 3.000 ‘menas’ ante la insolidaridad territorial
El vicepresidente del Gobierno, Manuel Domínguez, reclama al Estado "más medios humanos y técnicos" para las Islas, que detectan solo al 25% de las pateras. Fracasa la cohesión autonómica con los menores
Canarias acoge a más de 3.000 menores inmigrantes no acompañados (menas); la mayoría es de origen marroquí. Los servicios sociales municipales reclaman más cohesión territorial con la Península.
Pero la solidaridad institucional es un fracaso a la vista de los resultados. Madrid, por ejemplo, da cobijo a 269 y Castilla-León, a 88; Andalucía, que es la segunda región que más tutela, cuenta con 400, igual que Valencia; Baleares, otra de las comunidades turísticas, dispone de 134. El grueso de los 3.000 ‘menas’ reside en Gran Canaria. El Archipiélago encabeza el ránking nacional.
El Reglamento de Extranjería atribuye a la Fiscalía General del Estado la responsabilidad de coordinar el Registro de Menores Extranjeros No Acompañados.
En este sentido, el vicepresidente de Canarias, Manuel Domínguez, exige al Estado que dote al Archipiélago “con más medios humanos y técnicos para luchar contra la inmigración irregular” tras el repunte en la llegada de cayucos que genera cifras superiores al millar de personas mensuales desde el pasado marzo.
Domínguez mostró su preocupación por la “tragedia humana que supone que miles de personas se jueguen la vida a diario para cruzar el mar desde el continente africano” y lamentó la opacidad del Gobierno estatal en esa materia “que impide a los canarios conocer, entre otros asuntos, datos tales como de cuántos efectivos profesionales dispone diariamente el Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE), encargado de detectar a larga distancia las embarcaciones que se aproximan a nuestro litoral”.
“Actualmente y con la tecnología con la que cuenta el SIVE y la obsolescencia del material que posee –prosiguió el vicepresidente– apenas se detectan al 25% de las pateras, cayucos y embarcaciones neumáticas que ponen rumbo a Canarias. Esto es debido a la falta de medios técnicos y humanos con la que cuenta la Guardia Civil y ante la inexistencia de una plataforma que pueda impulsar la cooperación con la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas (Frontex)”.
En este punto, Manuel Domínguez apuesta también porque el Estado “incremente los sistemas de detección temprana a través de la cooperación nacional e internacional con la policía y las organizaciones no gubernamentales de los países de origen desde donde zarpan estas embarcaciones, así como la aportación de más personas y más medios técnicos que ayuden a paliar el número de vidas que se pierden en el mar. El SIVE, con la tecnología de la que dispone ahora, no puede detectar a la mayor parte de las pateras y cayucos debido al material con el que están fabricados”.
De igual manera, el vicepresidente canario lamentó que el presidente del Gobierno “venga a Canarias a pasar sus vacaciones estivales y viva de espaldas a la realidad que tenemos en las Islas cada verano en materia de inmigración irregular. España debe liderar ese papel al ser la frontera sur de Europa y entenderse también con otros países emisores del área francófona, además de Marruecos, para realizar acciones de carácter social. Nuestro país, desgraciadamente, tampoco dispone de un Plan África que sea eficaz y que sirva para captar fondos europeos con los que poder mejorar nuestra capacidad de respuesta ante el desafío migratorio”.
Según los datos de los que dispone el Gobierno de Canarias, en este 2023 han arribado a las costas de las islas un total de 9.338 personas a bordo de embarcaciones como pateras, cayucos o lanchas neumáticas, siendo junio, con 2.697 personas, el mes que registró un mayor índice de llegadas. Solo en lo que llevamos de agosto, se han contabilizado ya a 829 personas, entre las que figuraban menores y mujeres embarazadas.