Cabo Verde suprime los vuelos con Canarias
Las rutas desde Las Palmas a Praia, Sal o Mondelo se desvían hacia Lisboa o Dakar, con precios superiores a los mil euros y más de 30 horas de duración. Más de medio centenar de canarios 'atrapados' en la ex colonia portuguesa
Cabo Verde suprime los vuelos con Canarias. En esta ocasión el Covid no ha tenido nada que ver. Simplemente, la conectividad se ha roto.
Las rutas desde Las Palmas a Praia, Sal o Mondelo se desvían hacia Lisboa y Dakar, con precios superiores a los mil euros y más de 30 horas de duración. Más de medio centenar de canarios se encuentran ‘atrapados’ en la ex colonia portuguesa.
La salida del mercado de Cabo Verde de Binter, en una primera fase, y de Icelandair, con posterioridad, llevó al Gobierno local a suprimir las rutas con Canarias a pesar de los convenios bilaterales firmados con el gabinete de Fernando Clavijo (CC), antes de 2019.
Desde octubre de 2021, “volar a Canarias es una odisea. Es muy caro”, se quejaba un empresario que lleva cinco años en Sal en declaraciones por teléfono a este periódico.
El Gobierno de Canarias invirtió unos 4 millones de euros en la apertura de una casa oficial en Cabo Verde, mientras que el volumen de dinero público y privado invertido en más de 20 años supera los 70 millones de euros.
En Cabo Verde operan, además, la mayor parte de las cadenas hoteleras españolas que utilizaba Canarias como base para trasladarse al archipiélago situado a 2 horas del aeropuerto de Gando.
El actual Ejecutivo presidido por Ángel Víctor Torres apenas ha dado prioridad a la relación con Cabo Verde ante la irrupción del parón turístico por la pandemia y la crisis del volcán de La Palma.

Canarias y Cabo Verde con José Carreias y Fernando Clavijo, arropados por la bandera española, en 2016. (Foto Espiral21).
La Dirección General de asuntos africanos declinó valorar la supresión de los vuelos con Canarias, mientras que un portavoz de Casa África apeló a la “soberanía” del Gobierno caboverdiano para “dar los pasos que considere en su conectividad”.
La Cámara de Comercio de Gran Canaria, por su parte, reconoce las “enormes dificultades” que acarrea el fin de las rutas con Cabo Verde y espera que “aparezca una solución a medio plazo“.
La Cámara prevé desplazar a varios ejecutivos a Praia a través de una escala en Senegal.
Ni siquiera el anuncio que realizó en 2020 la ministra Carolina Darias para celebrar en Las Palmas la cumbre Hispano-Portuguesa, con la participación de Cabo Verde, ha servido para motivar la recuperación de los vuelos.
En 2021, el Gobierno caboverdiano recompra la aerolínea africana a Binter Canarias.
La sociedad Binter CV se constituyó en 2015 y llegó a mover unos 250.000 pasajeros en los 7 aeropuertos de la ex colonia portuguesa.
El Ejecutivo de Cabo Verde incluyó en la operación a las aerolíneas públicas de Angola, que tomaron el 70% de la compañía, aunque fue Icelandair la que se hizo con su gestión.
Binter mantenía en su filial caboverdiana una gestión indirecta con 3 aviones ATR y, al menos, 116 trabajadores.
Sin embargo, detrás de la distancia mostrada con Canarias, se escondería un componente de suseptibilidad “y no correspondencia”, según fuentes próximas al Consulado en Las Palmas que dirige Juan Cárdenes.
Cabo Verde fue el gran olvidado de la Macaronesia en la estrategia europea para superar el marasmo financiero que propicia el cero turístico.
Cabo Verde es uno de los países más deprimidos del planeta, con menos de 3.000 euros de renta per cápita por persona, que lo sitúa en el puesto 123 de una lista de 196 naciones.
Todo su futuro económico se depositó en el turismo, con inversores de grandes grupos hoteleros españoles, que ahora tratan de recuperar la actividad de forma paulatina.
La Sanidad es uno las grandes hándicaps del país, ya que la mayor parte de los turistas exige el sello de seguridad sanitaria.