Autónomos rechazan la subida del Salario Mínimo
El Gobierno aumenta en tres años el SMI un 35% pero mantiene intacto el precio de los contratos públicos con los proveedores privados. La subida excluye a 12 millones de trabajadores, que cobran más de mil euros
Autónomos, tanto empresas como profesionales, rechazan la subida del Salario Mínimo pactada por el Gobierno y los sindicato contra el criterio de la patronal CEOE.
El presidente de la Asociación de Autónomos (Ata), Lorenzo Amor, recuerda que el grueso de las empresas españolas tienen consignados salarios mínimos superiores a los mil euros, una medida que agrupa a 12 millones de trabajadores.
En cambio, la propuesta de la vicepresidenta, Yolanda Díaz, va dirigida a 2 millones de empleados que trabajan para micropymes y autónomos que “no han podido recuperarse de la crisis sanitaria y económica” derivada del Covid, según declaraciones a los medios de comunicación.
Lorenzo Amor recuerda que el aumento salarial “llega en el peor momento” donde los autónomos “solo hemos sido consultados“.
Para el presidente de ATA, es “preocupante” el impacto sobre negocios y actividades empresariales del sector servicios que han sufrido el impacto de la inflación (próxima al 7%), cuando no lo han trasladado a la clientela.
Además, el Gobierno se comprometió durante la pandemia a mejorar los pagos de los contratos de la Administración con las empresas proveedoras (jardinerías, limpieza o recogida de residuos). “No ha sido así, mientras que en poco más de dos años, el Salario Mínimo ha subido un 35%“.
En términos anuales, la renta, que afecta directamente a dos millones de trabajadores, va a pasar de 13.510 en 2021 a 14.000 euros este año, una subida del 3,6%. Este incremento se suma a los realizados por el Ejecutivo desde 2019, que han llevado a elevar el salario mínimo desde los 735 euros en 2019 hasta los 1.000 euros (lo que supone un alza del 36% en este periodo).
Díaz rubricó el acuerdo en nombre del Gobierno, mientras que los secretarios generales de CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez, respectivamente, firmaron por la parte sindical.