Argelia rompe relaciones con Marruecos
Argelia rompe relaciones con Marruecos. La decisión cogió por sorpresa a las autoridades europeas, más volcadas en el conflicto de Afganistán.
El ministro argelino de Asuntos Exteriores, Ramtane Lamamra, anunció la decisión de su país de romper las relaciones diplomáticas con Marruecos, su vecino y rival por la influencia en el norte de África, sobre el que mantiene un cerco fronterizo desde la guerra de 1994.
El canciller explicó que la decisión fue adoptada por el presidente de la República, Abdelmedjid Tebboune, tras escuchar las recomendaciones del Alto Consejo de Seguridad, y en respuesta a lo que denominó como actos hostiles de Marruecos, en particular el apoyo brindado a lo que su embajador en la ONU llamó el derecho a la autodeterminación de la Cabilia, región de mayoría bereber en el norte de Argelia.
A este argumento sumó la decisión de Marruecos de entablar relaciones diplomáticas con el Estado de Israel a cambio del reconocimiento de la soberanía marroquí sobre los territorios que ocupa desde 1975 en el Sáhara Occidental y unas recientes declaraciones del ministro israelí de Asuntos Exteriores, Yair Lapid, durante la histórica visita oficial que realizó el pasado 11 de agosto a Marruecos.
Lamamra también aludió al apoyo prestado por Rabat a dos conocidas organizaciones opositoras clasificadas como terroristas por las autoridades argelinas y a la presunta participación de los servicios secretos marroquíes en el programa de espionaje Pegasus, un virus de tecnología israelí que ha sido introducido en teléfonos de periodistas, activistas y responsables de todo el mundo.
Y denunció ofensas pasadas, como “la profanación de la bandera nacional en el consulado de Casablanca en 2013” y la parálisis del proceso de diálogo iniciado hace 30 años para resolver el conflicto del Sahara Occidental a través de un referéndum de autodeterminación tutelado por la ONU, situación de la que responsabiliza “a Marruecos y a sus políticas expansionistas en el Magreb“.