¿Apocalipisis platanera? Hongo asesino RT4 se expande
¿Apocalipsis platanera? New York Times, el periódico más influyente del mundo, acaba de lanzar esta semana la voz de alarma.
Acaba así el silencio mejor guardado en el negocio agrícola de Canarias sobre los riesgos que azotan en los cinco continentes a la variedad Cavendish, la cultivada en las Islas.
Meridian intentó sin éxito que las organizaciones de productores y de exportadores se pronunciaran sobre el hongo RT4, una cepa descubierta en 1980 en Taiwán que está arrasando gran parte de los cultivos de Asia, Sur de África e Índico (Australia sobre todo).
Gobierno de Canarias confirmó a este digital que las Islas están exentas de la amenaza gracias a su dispersión geográfica por mar.
Consejería de Agricultura, sin embargo, reconoce estar en “estado de vigía“.
Los ministerios español y portugués de Agricultura y los organizaciones mundiales de alimentación de Naciones Unidas están incorporadas a un cordón internacional para combatir los posibles efectos de un alimento que palia las necesidades básicas de millones de personas en países desfavorecidos.
Esta semana, el prestigioso The New York Times publicó lo siguiente (traducción Meridian):
“El banano que puede tener para el desayuno es, probablemente, el Cavendish, la variedad de más amplia difusión en una de las frutas más populares del mundo.
Sin embargo, un hongo mortal está en marcha, y la falta de diversidad genética del Cavendish es aumentando los temores de una posible ‘bananapocalypse’
El hongo asesino, llamado una cepa de raza tropical 4 Mal de Panamá, se ha extendido a China, Taiwán, Indonesia, Malasia y el Territorio del Norte de Australia, y se ha encontrado recientemente en África y Oriente Medio.
Con su cáscara y sin semillas de color amarillo fruta, el Cavendish conforma el 95% de los plátanos que se venden en todo el mundo, de acuerdo con el funcional U.N. Organización para la Agricultura y la Alimentación.
La variedad dominante anterior, el Gros Michel, fue diezmada por otra forma de hongo en la década de 1950. Los cultivadores se volvieron hacia el Cavendish, cuya fuerza radica moras en la resistencia a enfermedades de sabor. (Un experto dijo que “se había considerado algo cercano a la basura.”).
El Cavendish se cree que ha llegado en Inglaterra en la década de 1800 de Mauricio, tomando su nombre de la familia en cuya invernadero fue cultivada. Misioneros finalmente la llevó a las islas del Pacífico.
Un científico ve un rayo de luz en los esfuerzos de nueva urgentes para salvar las semillas de bananos silvestres. “Es una amenaza pero también es una oportunidad para empezar a crecer la diversidad moras”.
En 1980 se detectó en Taiwán una nueva cepa que sí ataca a los clones de Cavendish. Se denominó Mal de Panamá Raza Tropical 4 (RT4).
Se trata de una nueva mutación que desde hace dos años empezó atacando China, el Sudeste Asiático, Australia, Mozambique o Jordania.
Los científicos y técnicos que visitan essos países, y si no toman medidas, pueden contaminarse con solo tocar el suelo agrícola con sus zapatos o botas.
El Instituto Canario de Investigaciones Agrarias (ICIA) admitió en 2014 que no se percibía “mucha preocupación por la existencia de las enfermedades que acechan al Cavendish”. Desde Tenerife, el director científico del ICIA, Manuel Caballero, aclaró a la revista Quo que “es muy difícil que el mal de Panamá llegue a las Islas, porque los controles de importación de semillas y plantas son exhaustivos”.
Canarias exporta al año 400.000 toneladas de plátano al mercado peninsular (incluida Portugal). A cambio, percibe de la Unión Europa como ayuda por pérdida de renta (subvención) 142 millones de euros al año.

Distribución del negocio del plátano en Canarias. (Fuente, profesor Juan Nuez, en hojasbananeras.blogspot.com).