Álamo – Artiles, la razón de lo que sentimos
La exposición a dos en Bibli nos invita a transitar por la interpretación y a un viaje interior que, o bien empieza, o bien acaba en la fuerza del color. Incluso cuando éste parece ausente (Sólo parece)
Álamo – Artiles… Creo que, cíclicamente, Álamo se ve abocado por su fuerza interpretativa ante la vida, por el impulso mismo de su arte, a diseccionar cuanto ve. Y lo que aparentemente es simple, esconde toda esa complejidad que resulta del análisis.
Y así, de la mano de Fernando Álamo, siempre pasamos de la imagen a la emoción, de la primera impresión visual a la racionalización de lo que sentimos.
Nos invita siempre a transitar por la propia interpretación y a un viaje interior que, o bien empieza, o bien acaba en la fuerza del color. Incluso cuando éste parece ausente (Sólo parece).
Y también presentes siempre, la pasión y el deseo, la voluptuosidad y la ilusión por la vida, en cada pétalo y en cada curva. Sin marco, de nuevo.Sin finitud. Un arte que se desborda abriendo espacios para buscar el suyo propio, sin límites.
No hay límites que cerquen el lenguaje artístico de Álamo ni el de Artiles, ambos hacen suyos pared o muro… El proyecto ‘Álamo – Artiles’ que presentó el pasado viernes la galería Bibli de Santa Cruz de Tenerife, es un diálogo de arte en el Arte, por encima de todo.
El contexto generado entre ambos es un espacio a compartir por todos los visitantes que crucen el umbral de Bibli, confronta a dos artistas, Fernando Álamo y Raúl Artiles, donde se visibilizan las diferencias pero se alimentan vínculos que relacionan ambos trabajos.
Resonancias propias, las de Álamo y las de Artiles, en un único tablero de interferencias (el de Bibli), que nutren y enriquecen la comunicación artística. La de todos. Ya no hay ventana al mundo. El mundo es la ventana.
Después de todo, si el horizonte no termina donde el ojo abarca, por qué iba a hacerlo la imagen en límite alguno, por qué cercarla en un marco. Sin costuras ni fronteras, ’Álamo – Artiles’ en Bibli, una ‘green-zone’ en estos tiempos convulsos, que podrá visitarse hasta el próximo 24 de marzo.
Definitivamente, no hay nada más dotado para la resiliencia que el lenguaje del arte, ni más infinito para su logro final que la pintura, donde el uso del color es formato de vida… Un hilo para la memoria.
“Se me torna celeste la mano, me contagio de otra poesía” (Juan Ramón Jiménez).