Giza me sostuvo en la eternidad unos segundos y Aicha me trajo de vuelta
Memorias de nuestros viajes, episodio 12. La autora accede por el túnel de los ladrones hacia la cámara funeraria de Keops y, en ese instante, su corazón se para creyendo que profanaba el descanso del faraón. En realidad, estaba sintiendo la eternidad