Roberta Metsola, maltesa, preside el Parlamento Europeo
La maltesa Roberta Metsola preside el Parlamento Europeo, convirtiéndose así en la primera mujer en ocupar el cargo en 20 años. La conservadora sucede a David Sassoli fallecido a causa de compliaciones respiratorias. Metsola se presenta como una defensora de los derechos de las mujeres, pero en Europa es conocida su postura contra el aborto.
Roberta Metsola inicia el año presidiendo el Parlamento de 705 miembros de la Unión Europea (UE). La eurodiputada maltesa obtuvo un abrumador apoyo.
Miembro del Partido Popular Europeo (PPE) de centro-derecha, Metsola derrotó a la sueca de Los Verdes, Alice Bah Kuhnke, y la española de la Izquierda, Sira Rego, ganando 458 de los 616 votos emitidos en la primera vuelta, por lo que no se tuvo que organizar una segunda votación.
La elección se hizo por los mismos grandes grupos: populares, liberales y socialdemócratas, que llegaron a un acuerdo de última hora en la tarde del lunes. A dicha coalición se sumaron los diputados del grupo conservador y reformista, que retiraron a su candidato a primera hora de este martes y votaron a la diputada maltesa.
A través de su cuenta en Twitter, la nueva presidenta del Parlamento Europeo aseguró que era hora de que el organismo fuera dirigido por una mujer y que esta debe conectar con los ciudadanos de la Unión Europea más allá de las “burbujas” de Bruselas y Estrasburgo.
El Parlamento Europeo, cuyas funciones son adoptar y modificar las propuestas legislativas y decidir sobre el presupuesto del bloque europeo, ha tenido solo dos presidentas mujeres: Simone Veil (1979-1982) y Nicole Fontaine (1999-2002), ambas de Francia, desde que se convirtió en asamblea elegida directamente en 1979.
La eurodiputada Roberta Metsola se distingue por varias razones: es la tercera mujer y la más joven en ocupar el cargo de presidenta en la historia de la Eurocámara, además, es la primera de estas líderes en proceder de Malta, el país más pequeño de la Unión Europea con poco más de medio millón de habitantes.
En su primer discurso, la maltesa advirtió contra los nacionalismos y autoritarismos “falsos y baratos”, “que no ofrecen soluciones” y pidió “contrarrestar la narrativa antieuropea” de quienes siguen “poniendo a prueba los valores democráticos” del bloque.