Calamar sahariano deja de venderse en Canarias
Mercadona agota las existencias y lo suple por calamar indio; El Corte Inglés oferta la sepia; Carrefour e Hiperdino rebajan el precio de los stocks que mantenían congelados
Marruecos ya sufre la sentencia condenatoria de la Unión Europea (UE) sobre la soberanía de las aguas del caladero pesquero del Sáhara Occidental.
El calamar sahariano, uno de los productos más demandados en los restaurantes de Canarias, empieza a escasear.
En los grandes establecimientos comerciales se ha empezado a rediseñar la estrategia comercializadora sobre los cefalópodos. Y detrás del calamar vendrá el pulpo, según fuentes del sector alimenticio.
Por ejemplo, Mercadona ya agotó las existencias de calamar sahariano. Las pescaderías ofrecen, a cambio, calamar de La India a 7 euros el kilo.
El Corte Inglés también ha reaccionado incluyendo en su catálogo de pescado la sepia limpia a 11,95 euros.
Lidl, Makro y Alcampo no lo incluyen en su listado de ofertas, mientras que Carrefour e Hiperdino rebajan el precio de las mercancías que mantenían como congelados a un precio similar: 8,90 y 8,99 euros, respectivamente.
El precio habitual del calamar sahariano oscilaba entre 11 y 13 euros de media. Ahora, las existencias disponibles operan por debajo de 10 y en otros ha desaparecido.
La polémica del Cabildo GC amenazando a las empresas canarias que comercien con operadores marroquíes del Sáhara, ha amendrentado al sector de alimentación que había optado por dejar la libre elección a los consumidores.
Los supermercados que venden calamar han quitado simplemente la referencia sahariano.
Canalsa (Canarias de Alimentos), uno de los grandes mayoristas de la restauración, etiqueta en su web corporativa el calamar como artículo de enganche para su listado de productos del mar.
Canarias consume al año unas 2.400 toneladas de pulpo y calamar, 2 de las especies marinas más preciadas del caladero canario-sahariano que acaba de sancionar el Tribunal de Justicia de Luxemburgo.
Desde 2013, Marruecos prohibió faenar en las aguas del Sáhara a los arrastreros gallegos, canarios y andaluces, aunque sí permite que las flotas chinas, rusas y coreanas hagan su agosto en lo que fue una colonia española hasta 1975.
Para añadir más aristas al conflicto pesquero, el Cabildo de Gran Canaria denunció en febrero de 2018 en una moción oficial, aprobada por unanimidad, “la vulneración de los derechos económicos” del Sáhara por “el expolio de sus recursos naturales“.
La propuesta de Nueva Canarias fue secundada en su totalidad por el Partido Socialista, Podemos y Unidos x GC. El PP no votó al ausentarse del salón de plenos.
En marzo de 2018, el Cabildo lanzó otra andanada pero en esta ocasión a propuesta de Podemos, que también salió airosa, con el añadido de proceder contra las empresas canarias que se vinculen al Sáhara sin negociar, previamente, con los legítimos propietarios del territorio, los saharauis.
El Tribunal de Justicia de la UE ha sancionado en 2 ocasiones los acuerdos comerciales con Marruecos, en agricultura y pesca, por vulnerar los acuerdos de Naciones Unidas que no reconocen la soberanía marroquí sobre la ex colonia española.
Según el Cabildo GC, la venta y comercialización de recursos obtenidos en El Sáhara está prohibida sin se negocia con Marruecos.