Marruecos distrae a España: Mohamed VI se quedó a 5.000 kilómetros
Polémica por la imposibilidad de un encuentro personal de Sánchez con el monarca, que se extendió a una conversación telefónica de 30 minutos desde Gabón, uno de los grandes productores de petróleo del Golfo de Guinea
España se distrae en la cumbre de alto nivel con Marruecos. El rey aluita, Mohamed VI, se quedó a 5.000 kilómetros de distancia de Rabat, en Gabón, uno de los principales productores de petróleo del Golfo de Guinea.
La delegación española, formada por empresarios y 12 ministros del gabinete de Pedro Sánchez, se convirtió en carnaza de titular al insinuar un encuentro con el monarca magrebí, que no cristalizó porque la Casa Real dejó en manos del primer ministro, Aziz Ajanuch (uno de los hombres más ricos del país), el peso diplomático de la reunión.
Moncloa reaccionó de inmediato al enterarse, hacia las tres de la tarde hora de Canarias, de que Mohamed VI continuaba en Gabón, y de que no volvería a Marruecos, un vuelo que dura alrededor de 9 horas.
Sánchez conversó por teléfono con el rey marroquí durante media hora, un tiempo similar al dispuesto en los encuentros personales.
En realidad, el rango institucional se deja para los reyes y reinas, pero en los últimos mandatos, Mohamed VI hace una excepción cuando el presidente español ofrece su primer viaje de gobierno a Marruecos.

Sánchez y Ajanuch conversan en Rabat. A la izquierda, José Albares, Teresa Ribera y Nadia Calviño. (Foto La Moncloa).
España y Marruecos cooperan de forma intensa en la lucha contra el crimen organizado y el terrorismo yihadista, los dos ejes que definen el control del Estrecho tanto para la entrada y salida del transporte marítimo mundial como para la defensa que se ejerce desde la base de Rota, en Cádiz, con 4.000 soldados americanos y cuatro destructores.
Por tanto, los acuerdos previstos entre ambos países irán a más, favoreciendo la inversión bilateral (España está a la cabeza) y desplegando influencia ante potencias como Estados Unidos e Israel, tras el reconocimiento español a la marroquinidad del Sáhara Occidental.
Sin embargo, para las autoridades de Rabat, muy pendientes de las sutilezas de sus homólogos europeos, posiciones antimarroquíes como las ofrecidas por uno de los socios del Ejecutivo español (Unidas Podemos), aleja “la confianza mutua”, según analistas magrebíes consultados por este periódico. “No estamos ante ningún plante”.
Desde el PP, España ha sufrido “una humillación”, pero Moncloa defiende la ausencia del rey. “No resta ni un ápice de importancia a la cumbre. Los proyectos acordados serán tangibles”.