Kiessling se queda sin parque acuático en Gran Canaria
El Siam Park pierde su último cartucho al decaer el planeamiento del territorio sobre la infraestructura de ocio, según un fallo del Tribunal del Supremo, que desestima la apelación del Gobierno y Cabildo de Gran Canaria
Kiessling se queda sin parque acuático en Gran Canaria.
El Siam Park pierde su último cartucho al decaer el planeamiento del territorio sobre la infraestructura de ocio, según un fallo del Tribunal del Supremo adelantada por Canarias7.es.
Gobierno y Cabildo de Gran Canaria pierden el recurso en el que se habían personado como defensa.
La Sala III del Supremo desestimó la apelación del Consejo Insular de Aguas de Gran Canaria, del Cabildo Insular de Gran Canaria y la Comunidad Autónoma de Canarias, contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Canarias que declaró nulo el Decreto 373/15, de 7 de diciembre, de la Consejería de Política Territorial, Sostenibilidad y Seguridad del Gobierno de Canarias, de aprobación del «Plan de Modernización, Mejora e lncremento de la Competitividad en el ámbito de El Veril (municipio de San Bartolomé de Tirajana, Gran Canaria), cuya finalidad era promover y facilitar la instalación de un gran parque acuático (Siam park), siendo la sociedad promotora »Loro Parque, propiedad de la familia Kiessling.
El planeamiento del parque acuático, que era el objeto del Plan, no dejaba constancia de la existencia de recursos hídricos, que son de titularidad pública.
Asimismo, subraya en su pronunciamiento que no consta que en el procedimiento para el otorgamiento de la concesión se hubiese emitido informe garantizando la existencia y disponibilidad de dichos recursos hídricos, lo cual obliga a la desestimación del recurso.
La construcción del Siam Park llevaba aparejado un centro comercial y un hotel de cuatro estrellas.
Además de este pleito administrativo sobre cómo se proyectó el uso del suelo, el parque arrastra otro conflicto motivado por la Agencia Tributaria en el que se exige el pago de 12 millones de euros por los aprovechamientos públicos.
En la fase de alegaciones también figura el colectivo ecologista Turcón, que se opone al parque por la alteración medioambiental del ecosistema, la flora y la fauna.