Inspectores médicos garantizan el éxito policial contra las fiestas clandestinas antiCovid
Sanciones de 30.000 euros a un grupo de promotores en Tenerife que se saltaron las normas de prevención sanitaria. Guardia Civil y Policía Nacional lanzan masivas redadas en las Islas contra una actividad de riesgo para la salud y de riqueza que no tributa a Hacienda
Inspectores médicos garantizan el éxito policial contra las fiestas clandestinas antiCovid en Canarias.
La acción conjunta de los inspectores sanitarios con las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado carece de precedentes, pero va camino de convertirse en una de las herramientas más eficaces para prevenir y mitigar los contagios del coronavirus.
La presencia de los inspectores médicos en las acciones policiales contra las fiestas que suponen un riesgo para la salud por expandir la enfermedad, alienta el esfuerzo de los agentes a la hora de tramitar las diligencias.
Este sábado, 25 de julio de 2020, Tenerife fue la isla que mayor número de acciones policiales tramitó en una sola jornada.
Gracias a la coordinación de Guardia Civil, Policía Nacional, Policía Local y Policía Autonómica, se impusieron sanciones de hasta 30.000 euros al menos a 4 promotores de fiestas por supuesta vulneración de la Ley de Salud Pública.
Hasta ahora, los agentes policiales estaban limitados en su acción con multas de 100 euros por asistente a las fiestas en el caso que pudiera acreditarse el factor de riesgo.
Pero como consecuencia de los acuerdos adoptados el viernes, 24 de julio, en la Delegación del Gobierno, por parte de la junta regional de seguridad, encabezada por el consejero de Sanidad, Blas Trujillo (PSOE), y el delegado, Anselmo Pestana (PSOE), las fuerzas del orden cuenta con el apoyo logístico y físico de los inspectores médicos, que participan en la elaboración de los partes delictivos contra los organizadores de las fiestas, consideradas una de las plataformas más peligrosas para la extensión del coronavirus.
Los inspectores de Sanidad han sido considerados, hasta ahora, como uno de los cuerpos más precarios de la Consejería, tanto en la consideración profesional como en las remuneraciones.
Sin embargo, se trata de un cuerpo de élite, con alta solvencia y cualificación, que pasa a convertirse en piedra angular del sistema de control y erradicación de la campaña preventiva del Covid-19.
Canarias cuenta con un centenar de inspectores, de los que un alto porcentaje se especializarán en procedimientos antiCovid-19, junto a la Guardia Civil y la Policía Nacional.
El consejero de Sanidad ya ha iniciado los trámites para que se revisen al alza el tramo salarial que perciben los inspectores.
En las redadas de este sábado, en Tenerife, se aplicaron las mayores sanciones de Sanidad contra actos multitudinarios que ponen en riesgo la salud colectiva.
En paralelo, la Guardia Civil y la Policía Nacional están constatando que las fiestas clandestinas son una fuente de negocio de grandes dimensiones, con ingresos que rondan los 15.000 euros de beneficio neto.
Las concentraciones se organizan en villas o chalets a razón de 20-30 euros por entrada, con derecho a barra libre durante 6 y 8 horas y con aforos que oscilan entre 500 y 700 personas.
Sin embargo, la media de asistentes puede sobrepasar el millar y también el precio por acceso, que sube, según la duración, a 50 euros.
La totalidad de los ingresos, además, son opacos para la Hacienda pública.