Iglesia de Teror tantea incumplir los aforos por las misas del Pino
Iglesia de Teror tantea incumplir los aforos impuestos por el Gobierno regional para las misas en honor a la patrona de Gran Canaria, la Virgen del Pino, que se verán limitadas por las medidas de contención al coronavirus.
El párroro de la villa mariana, Jorge Martín, no desmiente el contenido de un mensaje distribuido en las redes sociales (sin firma ni rigor institucional) que adelantaría un desacato a las normas anunciadas por el presidente, Ángel Víctor Torres, que fija un tope de 10 personas en las celebraciones deportivas, religiosas o culturales durante, al menos, 15 días.
La dirección de la iglesia del Pino haría bien en observar la crisis regional del Covid en Gran Canaria, Lanzarote o El Hierro. En las 3 islas, Sanidad ha decretado la alarma sanitaria aplicando el cien por cien del plan de contingencias ante el aumento de los casos, con más de 7.000 positivos en el Archipiélago.
Los picos de contagios son tan elevados que Educación prevé aplazar el inicio de las clases y socios comerciales de la economía canaria, como el turismo alemán, están a punto de clausurar el pasillo aéreo.
Es decir, el Covid constituye un problema de salud tan grave que un párroco de altura como es Jorge Martín, teólogo y doctor en Derecho Canónico, debería expandir el debate sin dar pábulo a mensajes anónimos que apuntan a llenar la basílica del Pino con un 75% de participantes.
Que haya coincidido el calendario del Covid con las misas del Pino o de las Marías es un fastidio igual de adverso que la suspensión de la romería y del resto de las fiestas tradicionales. Y, por eso, el domingo 30 de agosto, se difundió un mensaje en el que, supuestamente, Teror y Valleseco (y el resto de la zona pastoral) aplazaban los oficios. Este lunes, 31, un whatsapp apuntaba lo contrario. Alguien tira la piedra y esconde la mano.
Al César, lo que es del César (Estado de Derecho) y a Dios, lo que es de Dios (la oración).