Criminalidad, el tabú de la campaña. ¿Conoces el caso sueco?
El país del ideario pacifista se ha convertido en menos de una década en el territorio más violento de Europa, con la irrupción incluso de una versión del Pablo Escobar escandinavo
Criminalidad y seguridad se han convertido en el tabú de la campaña electoral. Ni un solo partido con expectativas a entrar en las instituciones canarias se ha asomado a la preocupación prioritaria de la ciudadanía junto a la economía y la salud.
Aunque las cifras convencionales acreditan que en 2023, la criminalidad bajó un 6%, los datos de violencia crecieron más de un 20% en 2022, tras la vuelta a la normalidad por la pandemia.
Sin embargo, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y las policías autonómica y locales no se fían un pelo, y mantienen abiertos todos los monitores de control y vigilancia.
Tras las amenazas yihadistas, la posible comisión de un atentado obliga a España a mantener el nivel 4 superior en la alerta global. Así y todo, los partidos pasan tan de puntillas que ni uno (incluido Vox) han querido entrar en el debate a preguntas de este periódico, sobre todo, tras la muerte por arma blanca de un joven de 22 años en un bar de Guanarteme, en la capital grancanaria.
El prestigioso periódico The Wall Street Journal publicó esta semana, como noticia destacada, el vuelco de la sociedad sueca, considerada el paraíso del bienestar pacifista, pero que ahora, con el arribo de bandas del narcotráfico y la irrupción de la versión del Pablo Escobar escandinavo, se ha convertido en el país más violento de Europa. “Nadie lo esperaba y, lo que es más llamativo, es un fenómeno que podría mimetizarse en todo el continente“, según expertos en seguridad.
Cuenta el rotativo americano que una tarde de marzo, la policía sueca pidió a la versión nacional de “America’s Most Wanted” que transmitiera fotos de dos jóvenes buscados por disparar contra una banda de narcotraficantes rival en Uppsala, al norte de Estocolmo.
Tres horas después, pistoleros desconocidos llamaron a la puerta de Serdar Sarihan, el padre de uno de los sospechosos. Lo mataron a tiros mientras su familia permanecí escondida en el piso superior.
El asesinato, interpretado como un tiroteo de venganza, abrió un nuevo capítulo de brutalidad en una ola de violencia de pandillas que ha convertido a Suecia en la peor pesadilla de homicidios con armas de fuego en Europa.
Las guerras territoriales por el control del narcotráfico, impulsadas por una afluencia de armas, vendettas personales y un grupo de jóvenes sicarios, muchos de comunidades de inmigrantes marginadas, han desatado una tasa de homicidios con armas de fuego de casi el triple veces el promedio europeo, según el Consejo Nacional para la Prevención del Delito.
Con 62 personas muertas a tiros el año pasado, frente a las 45 de 2021, la tasa general de homicidios de Suecia es aproximadamente una sexta parte de la de Estados Unidos. Pero en un contexto europeo, es extraordinario. La tasa de asesinatos con armas de fuego de Estocolmo fue aproximadamente 30 veces más alta per cápita que la de Londres.
Los perpetradores son cada vez más jóvenes y también recurren a tácticas cada vez más violentas, como lanzar granadas de mano y colocar bombas, hiriendo a un número cada vez mayor de transeúntes, incluidos niños.
El líder pandillero más notorio que alimenta la violencia es Rawa Majid, de 36 años, más conocido como el zorro kurdo.
Debido a que la mayoría de los tiroteos en Suecia tienen lugar entre personas de origen inmigrante, han alimentado una oleada de populismo de derecha. En las elecciones de 2022, los Demócratas de Suecia, un partido que tiene raíces en el nazismo y culpa a las políticas migratorias liberales de Suecia por la violencia, logró el 20% de los votos para convertirse en el segundo más grande del país.
El nuevo gobierno de centro-derecha prevé endurecer las políticas migratorias, duplicar las sentencias por delitos cometidos en “ambientes de pandillas”, ampliar el uso de la vigilancia electrónica y expulsar a más delincuentes que no sean ciudadanos suecos.
Hoy en día, se estima que entre el 75% y el 80% de los tiroteos mortales siguen sin resolverse, y el bajo riesgo de ser atrapados ha llevado a un número cada vez mayor de jóvenes a matar por las recompensas emitidas por los líderes de las pandillas.
Suecia es uno de los principales mercados turísticos de Canarias.