British Airways y Lufthansa suspenden vuelos a Egipto por seguridad en plena crisis iraní
Las 2 compañías evalúan los sistemas de calidad y vigilancia del aeropuerto del Cairo. Egypt Air aprovecha la ocasión para ampliar la conexión con Londres
British Airways y Lufthansa suspenden vuelos a Egipto por seguridad en plena crisis iraní.
Las 2 compañías evalúan los sistemas de calidad y vigilancia del aeropuerto del Cairo, mientras que Egypt Air aprovecha la ocasión para ampliar la conexión con Londres.
British Airways, dueña de Iberia y Vueling, no descarta recuperar la normalidad con la capital egipcia pero las rutas con el país de las pirámides se han cancelado sin fecha definitiva.
El Ministerio de Asuntos Exteriores británico advierte incluso sobre todos los viajes que no sean esenciales por vía aérea desde y hacia el centro turístico egipcio de Sharm el Seij.
Lufthansa ha secundado a la británica y ha anunciado la suspensión temporal de sus vuelos a la capital egipcia como medida de precaución “mientras se llevan a cabo nuevas verificaciones“, según fuentes del sector.
Tanto Alemania como Reino Unido son los principales emisores de turistas a Canarias.
Los operadores canarios consultados por este periódico han optado por la discreción a la espera, eso sí, de “nuevas noticias”.
Canarias atraviesa uno de los peores años en ocupación de la última década como consecuencia de la rotación de turistas hacia países como Egipto. “Todavía es prematuro intuir qué derivada tomará la decisión sobre Egipto. Da la impresión de que estamos ante un hecho puntual pero la envergadura política del suceso de Irán, apresando un barco de bandera inglesa, puede deparar consecuencias serias para la economía de la zona“, según fuentes del sector turístico.
BA y Lufthansa han sido, hasta ahora muy prudentes con la decisión adoptada sobre el aeropuerto del Cairo, pero el anuncio coincide con los graves episodios de Ormuz.
Varios responsables iraníes admiten que la captura del petrolero británico Stena Impero el viernes, 19 de julio de 2019, en el Estrecho de Ormuz, es un acto de represalia por la retención en Gibraltar del barco iraní Grace 1 desde hace dos semanas.
Las principales autoridades del país no se han pronunciado hasta ahora sobre la captura efectuada por la Guardia Revolucionaria iraní y la versión oficial es que se debió a una infracción de la normativa de navegación.
El ministro iraní de Exteriores Mohamad Yavad Zarif ha exigido a Reino Unido dejar de ser “cómplice” de las sanciones de Estados Unidos contra Irán.
“Reino Unido debe dejar de ser cómplice del terrorismo económico de Estados Unidos“, expresó Zarif en su cuenta oficial de Twitter, en alusión a las sanciones impuestas por Washington a Irán tras retirarse del acuerdo nuclear de 2015.
La ministra de Defensa británica, Penny Mordaunt, declaró la captura del petrolero Stena Impero como un “acto hostil” y aseguró que la fragata HMS Montrose estaba a tan solo una hora de donde se produjo el abordaje, según informa ‘The Daily Telegraph‘.
El Stena Impero, con 23 tripulantes a bordo, permanece temporalmente anclado en Bander Abbas, unos de los mayores puertos militares iraníes.
En torno a 15 petroleros con bandera británica atraviesan a diario el estrecho de Ormuz, por donde circula el 20% del crudo que consume en el mundo.